Dada su similitud, los términos “gestión de la cartera de proyectos” y “gestión de proyectos” a veces se utilizan como sinónimos. Sin embargo, describen dos estrategias diferentes, cada una con sus propios casos de uso y objetivos asociados.
La gestión de proyectos es un término amplio que describe las estrategias, las herramientas y las técnicas utilizadas para administrar un proyecto. Los proyectos son temporales; existen durante un periodo específico e, idealmente, dan como resultado un producto o servicio terminado. Las oficinas de gestión de proyectos (PMO) y los gerentes de proyectos utilizan la gestión de proyectos para apoyar la finalización de los proyectos mediante el establecimiento de costes y presupuestos, la asignación de recursos, la asignación de responsabilidades y la presentación de informes a las partes interesadas.
La gestión de la cartera de proyectos coordina y analiza el posible valor de las colecciones (carteras) de proyectos, programas y solicitudes relacionados. PPM es un enfoque de mayor nivel que vincula la gestión de proyectos con la gestión de la empresa, ayudando así a las empresas a seleccionar proyectos en función de su adecuación o apoyo a los objetivos de la organización.