Satisfacer las necesidades de los clientes es una manera segura de mejorar la fidelidad hacia la marca. Sin embargo, si solo respondes a las necesidades a medida que surgen, siempre irás un paso por detrás. Anticiparse a las necesidades de los clientes debe ser una parte integral del proceso de diseño del producto, que debe basarse en los problemas que tu producto o servicio resolverá, así como en el público al que se destinará.
Al igual que ocurre con la mayoría de los aspectos de la experiencia del cliente, anticiparse a las necesidades del cliente depende, en gran medida, de la capacidad para escuchar y analizar a la base de clientes. Lo anterior puede hacerse de forma sencilla, comunicándose con los clientes en las redes sociales o pidiéndoles que respondan encuestas, pero también desde un enfoque más complejo, que puede incluir una investigación en profundidad de palabras clave del motor de búsqueda o análisis predictivos para identificar tendencias.
Como ejemplo de satisfacer las necesidades de los clientes, piensa en un servicio digital que sufre una breve interrupción. Es posible que el cliente no note la interrupción momentánea del servicio, pero el problema se puede abordar de forma proactiva comunicándose con aquellos clientes que podrían haberse visto afectados e incluso ofreciéndoles algún tipo de compensación, como un descuento especial o crédito gratuito. Supervisar y reconocer proactivamente las interrupciones del servicio ayuda a demostrar el compromiso con la experiencia del cliente y puede mejorar la fidelidad.